Christo y Jeanne-Claude

La mayor exposición nunca antes dedicada a Christo y Jeanne Claude traza la historia de este proyecto, 1975-1985, y recuerda su periodo parisino, entre 1958 y 1964, antes de la envoltura del Arco del Triunfo de París, prevista para 2021.

Christo (Christo Vladimirov Javacheff) y Jeanne-Claude (Jeanne-Claude Marie Denat), ambos nacidos el 13 de junio de 1935, respectivamente en Gabrovo (Bulgaria) y Casablanca (Marruecos), se conocen en París a la edad de 23 años. Christo huye de la Bulgaria comunista, pasando por Praga, Viena y Ginebra, y se establece en París en marzo de 1958. Su formación en la Academia de Bellas Artes de Sofía le aporta el dominio de las disciplinas clásicas, pero él no se conforma con la pintura de caballete. Los años parisinos de Christo forjan su lenguaje artístico: el trabajo en relieve de las superficies, el apilamiento, el embalaje, el comienzo de las ventanas cubiertas y, en colaboración con Jeanne-Claude, el desarrollo de proyectos monumentales al aire libre que caracterizan el enfoque creativo de ambos artistas.

La primera parte de la exposición presenta creaciones de los años 1958 a 1964, cuando la pareja se instala definitivamente en Nueva York. La segunda describe todas las etapas del proyecto parisino El Pont-Neuf envuelto, llevado a cabo de 1975 a 1985. A mitad del recorrido, la película de los hermanos Maysles Christo en París (1990) informa sobre el desarrollo de este proyecto urbano mientras evoca la biografía de esta pareja excepcional cuyo trabajo conjunto ha dado algunas de las obras más espectaculares de la historia de los siglos XX y XXI.

A su llegada a París, para ganarse la vida, Christo realiza retratos al óleo sobre lienzo de familias de la alta sociedad. Paralelamente, envuelve pequeñas cajas de metal cilíndricas y botellas con tela, endurecida con laca y las rodea con una cuerda. Esta iniciativa, que luego incorpora a muebles y barriles, constituye lo que Christo llama su "inventario". También confecciona superficies de embalaje utilizando papel, otras veces tela, dándoles un aspecto accidentado mediante arrugas y pliegues fijados con laca y oscurecidos en algunas partes por la pintura. Luego, el artista añade arena o polvo para empobrecer el aspecto. Con estas piezas, Christo responde a las búsquedas pictóricas parisinas de la época. Pero es sobre todo la obra matérica de Jean Dubuffet la que impulsa una serie desconocida y presentada aquí por primera vez: sus famosos Cráteres. El vocabulario del artista se extiende pronto a los barriles, que apila en forma de columnas o acumulaciones. En otoño de 1961, en oposición a la reciente construcción del Muro de Berlín, idea bloquear con barriles la calle Visconti de París, proyecto que lleva a cabo con la complicidad de Jeanne-Claude en la noche del 27 de junio de 1962, antes de que la policía le ordene desmantelar su edificio. Ya en 1961, Christo había pensado envolver un edificio público parisino. Y en 1962 expresa el deseo de cubrir el Arco de Triunfo, un proyecto que por fin podrá realizar en 2021.

La cronología exacta de las experiencias artísticas parisinas de Christo no resulta fácil de establecer. A partir de 1960 inicia su serie de Envolturas, su creación más conocida de los años 1958-1964, para las que Christo suele emplear tela, en un primer momento arrugada y lacada, y luego empieza a experimentar con tejido crudo. El artista se centra entonces en la asociación de varias texturas, en el juego de materiales y de colores. Las cuerdas y los cordeles también se eligen con precisión. Sin embargo, el contenido de las Envolturas sigue siendo un misterio: el artista se niega a desvelar los objetos ocultos. A partir de entonces, Christo solo cubre parcialmente ciertos objetos, en particular muebles. En 1960, descubre el polietileno, un plástico transparente con el que comienza a envolver estatuas y modelos vivos.

A finales de 1962, Christo participa en la exposición Nuevos realistas de la galería Sidney Janis de Nueva York. Pese a la importancia de este evento para Christo, presentado junto a reconocidos estadounidenses como Andy Warhol, en el texto de presentación del catálogo es clasificado incorrectamente entre los artistas ready-made. De hecho, el gesto de Christo nada tiene que ver con este enfoque, salvo un comentario sobre la cuestión del embalaje en la sociedad industrial. Por último, la asociación de Christo con el movimiento del nuevo realismo, fundado por Pierre Restany en octubre de 1960, es solo puntual y nunca se integra en el grupo, pese a su amistad con algunos de sus miembros.

Antes de instalarse en Nueva York con Jeanne-Claude, en 1964, Christo comienza a experimentar con la envoltura de escaparates y fachadas de tiendas, que oculta desde el interior con papel o tela, y que se convertirá en la serie Store Fronts, que confirma el interés del artista por la dimensión arquitectónica, constituyente de los proyectos urbanos desarrollados posteriormente con su esposa y colaboradora artística.

El proyecto de envoltura del Pont-Neuf es un excelente ejemplo de ello y constituye el tema de la segunda parte de la exposición. A partir de 1975, Christo y Jeanne-Claude desarrollan la idea de envolver el Pont-Neuf con una lona de poliamida de color arenisca dorada para cubrir los lados y las bóvedas de los doce arcos del puente, los parapetos, los bordillos y las aceras (el público debería así poder caminar sobre el lienzo), sus cuarenta y cuatro farolas, así como las paredes verticales del terraplén del extremo occidental de la Isla de la Ciudad y de la plaza du Vert-Galant.

Con la envoltura del Pont-Neuf, Christo y Jeanne-Claude deseaban no solo crear una obra temporal en contacto directo con la realidad, sino además inscribir su propuesta en la historia de este puente parisino como fuente de inspiración de artistas. Después de Turner, Renoir, Brassaï, Pissarro, Marquet... Christo y Jeanne-Claude van más allá de la cuestión de la representación pictórica para llevar a cabo una transformación que subraya las cualidades arquitectónicas del puente y renueva nuestra relación con la comprensión de sus volúmenes y la deambulación. Como todos sus proyectos al aire libre, El Pont-Neuf envuelto, París, 1975-1985, se exhibió durante un breve periodo de tiempo (del 22 de septiembre al 6 de octubre de 1985) y requirió un dispositivo técnico y humano descomunal. ¡Así como diez años de negociación con políticos y vecinos! Los artistas financian sus creaciones monumentales exclusivamente con la venta de collages y dibujos preparatorios realizados por Christo desde el inicio del proyecto. Sin embargo, se aseguran de mantener, para cada proyecto importante, un conjunto significativo de estas obras, la maqueta del proyecto, documentos que registren las etapas de su realización y los elementos de ingeniería que reflejen la estructura protectora del monumento. Esta exposición recoge de hecho, a modo de gigantesca instalación, el conjunto de elementos en torno a la envoltura del Pont-Neuf que evidencia que los proyectos urbanos de Christo y Jeanne-Claude no se limitan al tiempo de la envoltura, sino que comienzan desde los primeros enfoques y negociaciones, como parte de la realidad de la vida.

Por Sophie Duplaix
Conservadora jefa de Colecciones contemporáneas, Musée National d’Art Moderne, Centre Pompidou
Comisaria de la exposición
In Code couleur n°36, enero-abril 2020, p. 16-19