Exposición / Museo
Premio Marcel Duchamp 2019
Primer premio

El evento ha terminado

Para su decimonovena edición, el premio Marcel Duchamp presenta proyectos con fundamentos plásticos muy diferentes y refleja de este modo, gracias a la elección del comité de selección de la ADIAF, la diversidad de las disciplinas que coexisten en la actualidad en Francia.
Éric Baudelaire, cineasta por predilección, construye un generoso dispositivo de exposición partiendo de una película rodada a lo largo de las clases con estudiantes de Seine-Saint-Denis.
Katinka Bock y Marguerite Humeau proponen, por su parte, dos enfoques diferentes de la escultura: mientras que la primera retoma con fineza la herencia de una escultura contemporánea que pone de manifiesto una materialidad frágil, la segunda reanuda poéticamente con la narratividad y promete, a su manera, sobre premisas científicas ancladas en el presente, nuevos temas mitológicos.
Pero el acontecimiento más singular de esta edición es sin duda el retorno de la pintura, ausente durante mucho tiempo del premio Marcel Duchamp, lo cual ha sido posible gracias al travieso proyecto de Ida Tursic y de Wilfried Mille: el dúo interroga con una gracia seria la posibilidad misma de pintar en la actualidad.

Quando
11:00 - 21:00, todos los días excepto martes
Dónde
Les nommés
Éric Baudelaire
Arraigada en una tradición crítica propia a la vez del arte conceptual y del cine godardiano, la obra de Éric Baudelaire(nacido en 1973) busca a «poner en crisis» los sistemas de representación que estructuran los imaginarios contemporáneos. Baudelaire, apoyándose principalmente en su formación inicial en ciencias políticas, se empeña en desplazar la visión que se tiene sobre diferentes hechos políticos y sociales y renueva de esta manera en el presente los usos del distanciamiento. Al convocar diversas disciplinas, sus dispositivos de exposición combinan la posibilidad de debate con la película, la fotografía y el texto impreso.
El proyecto que presenta en el marco del premio Marcel Duchamp 2019, Tu peux prendre ton temps (Puedes tomarte tu tiempo), se articula en torno a Un film dramatique (Una película dramática), largometraje cuya producción comenzó hace cuatro años. Veinte alumnos del instituto Dora Maar, situado entre Saint-Denis y Saint-Ouen, son a la vez el sujeto, los actores y los autores. Cuestionando la naturaleza del medio cinematográfico a través de su descubrimiento por los estudiantes, la película muestra la manera en que estos últimos se representan, lejos de todo cliché sobre este departamento «sensible». El dispositivo construido por Baudelaire en torno a la película revela el vacío del espacio de exposición. El conjunto se prolonga más allá de los muros, en Saint-Denis, donde Baudelaire ha instalado en referencia al trabajo de Daniel Buren, en la cima de la torre Pleyel, una bandera realizada por una de las estudiantes.
Katinka Bock
Situada en el cruce de varias disciplinas, la obra de Katinka Bock (nacida en 1976) ofrece una nueva lectura precisa y delicada de una historia de la escultura en un «ámbito más amplio». Bock prolonga la herencia post-minimalista a través de diferentes técnicas tradicionales y somete el proceso creativo a las leyes de la física, poniendo así de relieve las cualidades primeras de la materia. Sus «puestas en situación esculturales» resultan de la definición previa de parámetros simples, que determinan el devenir. Se pliega asimismo al lugar en el que se inscribe, sobre el modo de la huella, de la medición o de la infiltración. El conjunto esculpido que Katinka Bock propone para el premio Marcel Duchamp 2019 refleja las múltiples facetas de su trabajo. En Landumland, la dimensión in situ se vislumbra de varias maneras: la obra se articula en torno a un damero de placas de cobres, que se han dejado durante varios meses en una de las terrazas del Centre Pompidou para que se oxiden, cubiertas por un amplio paño de tela que llevará por siempre la marca. Sobre este damero se dispone un radiador que Bock ha tomado prestado a un residente del barrio y que se ha puesto en funcionamiento gracias a un circuito hidráulico cerrado. Landumland ha sido asimismo expuesto a la degradación de los materiales que lo componen: así, dos limones atados a una varilla metálica modifican la flexión de esta última a medida que se estropean. El aspecto antropomorfo o zoomorfo de las figuras esculpidas por Bock cuestiona una forma de «vivir juntos».
Marguerite Humeau
Marguerite Humeau (nacida en 1986) sitúa la narración en el corazón de su disciplina. Entre cuentos maravillosos y distopias contemporáneas, compone relatos especulativos donde se entrelazan hechos y ficción, generando o resucitando formas de vida desaparecidas a partir de diversas fuentes científicas, en especial la prehistoria y la biología. El imaginario poético desarrollado por Humeau se apoya en la atención particular que presta a los materiales innovadores así como a las tecnologías más avanzadas en materia de moldeado y de impresión. Apoyándose en figuras esculpidas o sonoras, el relato se desarrolla dentro de instalaciones pluridisciplinarias. La trama narrativa del proyecto presentado para el premio Marcel Duchamp 2019 se apoya en observaciones etológicas que plantean la hipótesis de nuevos comportamientos religiosos adoptados por ciertos animales en respuesta a los trastornos climáticos y a las consiguientes extinciones masivas. Presentados en el centro del espacio, «bailarines» – sistemas respiratorios de criaturas marinas – parecen ser víctimas del envenenamiento de los océanos. Los pulmones se hinchan y se deshinchan, y terminan por ejecutar un rito bailado colectivo en dirección a la Luna. Esta, venerada por los animales desde su reino subacuático, se mueve en función de la fuerza gravitatoria ejercida sobre el astro celeste en este punto preciso. El ruido de una criatura desconocida que habita los muros de la galería envuelve el grupo animado en una masa sonora.
Ida Tursic y Wilfried Mille
Ida Tursic y Wilfried Mille (nacidos en 1974) se libran a una divertida exploración de la condición del medio pictórico en la era post-histórica. Recortados, superpuestos, colocados contra los rieles, colgados a estructuras, colocados sobre zócalos, sus cuadros-objetos ocupan el espacio y niegan con gracia la preeminencia de la bidimensionalidad en la pintura. En una línea picaresca, Tursic y Mille rebaten también la pertinencia del estilo. Retomando el mito del artista-demiurgo, se entregan de buen grado a la abstracción gestual, sin por ello renunciar a la figuración. Elemento central de su obra, la figuración reposa sobre la apropiación de la imaginería producida por la «sociedad del espectáculo»: aboliendo toda forma de jerarquía entre los sujetos y las fuentes, su empresa de reciclado trata indistintamente motivos pornográficos o domésticos, encontrados en Internet o en las películas de autor.
En la propuesta realizada para el premio Marcel Duchamp 2019, el recorte previo del soporte pictórico ocupa un lugar predominante. El contorno del soporte de madera duplica el de los objetos representados – perros de salón rescatados de un pasado neo-pop, un joven efebo gigante que solo lleva un sombrero, pero también manchas de pintura exageradamente agrandadas, elementos fetiches de la mitología del pintor y de su taller. Los unos sobre los otros, jugando con efectos de escala, estos cuadros-decorados forman una escena donde se representaría alegremente el «drama» de la pintura contemporánea.
Source :
Por Nicolas Luicci-Goutnikov
Conservador, Musée National d’Art Moderne, Centre Pompidou, Comisario de la exposición
In Code couleur n°35, septiembre-diciembre 2019, p. 32-35