Jean-Pierre Bertrand

Presentaciòn de la exposiciòn

Tras una formación cinematográfica que le lleva, desde finales de los años 1950, a trabajar como operador de ángulos, el artista francés Jean-Pierre Bertrand (1937-2016) inaugura su carrera de artista plástico a principios de los años 1970 con una interpretación algebraica del Robinson Crusoe de Daniel Dufoe. Es también a partir de ese momento cuando empieza a dirigir películas de artista en formato 16 mm y Super 8, de corta duración, a menudo silencioso, similares a los cuadernos de bocetos que considera que son más bien experimentos que obras. De las calles de Buenos Aires, donde recaba los elementos de un conjunto de trabajos marcados por la figura del escritor argentino Jorge Luis Borges, a las galerías de las antigüedades egipcias del Louvre, Jean-Pierre Bertrand teje a través de sus obras una red de relaciones que constituyen, cuando se abordan en su compleja totalidad, una interrogación sobre los dispositivos de representación y las nociones de tiempo, de espacio y de azar.

Presentada con motivo de la donación excepcional del conjunto de la producción cinematográfica y videográfica del artista al Centre Pompidou, esta exposición propone una nueva lectura de su obra utilizando como hilo conductor la porosidad de los medios como modalidad de producción y de circulación de las imágenes. El recorrido, que reúne un gran número de trabajos conceptuales realizados desde principios de los años 1970 (películas, fotografías, pinturas, dibujos, libros de artista y archivos), se articula en torno a unos principios de repetición y de serialidad que estructuran las investigaciones del artista.

Tal como lo muestra Racontant trois fois une histoire (Contando tres veces una historia). Racontant une histoire trois fois (Contando una historia tres veces) presentada en 1972 en la galería Sonnabend en París y reactivada con motivo de la exposición del Centre Pompidou, la obra de Jean-Pierre Bertrand funciona como si se atravesase un espejo, organizando incesantes pasajes de imagen fija e imagen en movimiento y tratando la superficie de representación y el marco como un espacio real y sin exterioridad.

Artista cuya práctica escapa a todo intento de clasificación, Jean-Pierre Bertrand escribía en letras azules sobre el cartel de su exposición en el ARC en 1981 estas líneas manifiestas que invitan al visitante de hoy a seguir el juego de las combinaciones infinitas: «The Diamon’d es el título de un conjunto de elementos que se manifiestan en el espacio por una forma, un contenido, la forma en que cada uno de ello se dispone y la manera en que configuran el conjunto. Los elementos pertenecen a una misma familia en la que cada uno de ellos sería el múltiplo de los otros al mismo tiempo que familias diferentes pueden corresponder entre ellas según ciertos procesos en los que toda interpretación reduciría su sentido nombrándola.»

Por Philippe-Alain Michaud, jefe de servicio cine experimental y Jonathan Pouthier, agregado de conservación,

Musée National d’Art Moderne, Centre Pompidou

In Code couleur n°35, septiembre-diciembre 2019, p. 40-41