Jim Hodges

El Centro Pompidou recibe a Hodges para la primera exposición personal que le dedica una gran institución europea. Artista reconocido en la escena americana, Hodges presenta cerca de sesenta de sus obras en el Museo que ofrece de este modo un panorama del trabajo y del universo singular de este creador de excepción.

Nacido en 1957 en el Estado de Washington, Hodges desarrolla, desde finales de los años 1980, un trabajo radical y original en el que el dibujo está omnipresente. Trata de la fragilidad, de la temporalidad, del amor y de la muerte, utilizando el vocabulario de la naturaleza e inspirándose de ella. El resultado es simple, bello, expresivo.

Muy contrastada, su obra puede ser minimalista, debido a la austeridad de algunas piezas, o barroca por su exuberancia, la riqueza de los materiales utilizados, los colores suntuosos y tornasolados que usa. El artista explora tanto materiales modestos como el papel, las pastillas de color o las flores en tejido, como materiales más sofisticados como la hoja de oro. Sus obras, influenciadas por la naturaleza, la literatura, pero también por la espiritualidad, combinan estos materiales con un trabajo meticuloso y preciso de collage, costura, montaje y recorte.

Ya sea en finas telarañas de cadena plateada, en fotos recortadas, en montajes de partituras musicales, en flores enganchadas o en espejos rotos que dibujan otra imagen de la realidad, Hodges expresa, mediante su trabajo, su visión de un mundo marcado tanto por la belleza y la alegría de vivir, como por la enfermedad y la muerte.